Un whisky con cola-light, por favor

Hoy me ha sorprendido una nueva enfermedad. Es curioso que antes las enfermedades se descubrían y hoy en día se inventan. Nosotros mismos generamos las patologías que sufrimos.



Reconozco que la primera vez que vi a alguien pedirse un whisky con cola-light me sorprendió. Después me fui acostumbrando y al final les di la razón. ¿Para qué vas a sumar doscientas calorías más a las trescientas que ya tiene el whisky? Supongo que yo nunca lo he hecho porque siempre he sido de los  “de perdidos al río” y de tomar el whisky solo. Pero tiene sentido. Tengo que reconocerlo.

Lo que no tiene sentido es ahorrarse la cena pensando en los tres cubatas de la noche. Ya han bautizado a la tontería como “alcoholéxia” e imagino que eso era lo que faltaba para que se pusiera de moda; etiquetarlo. Ahora se harán grupos en facebook para ser alcoholéxicos y todas las pijicrías querrán ser las más acoholexicas de la clase. Los noticiarios empezarán a utilizar la palabra porque andan escasos de variedad y los padres podrán decir a los abuelos, con la voz rota por los sollozos, que “la niña está enferma”.

¿Estamos tontos o qué? Dicen que en algunos países ya lo están tratando. Espero que sea con dos bofetadas.